El incendio que arrasó cerca de 700 hectáreas de matorral, zonas de cultivo, pasto y arbolado de la serranía de Ronda, en las inmediaciones del malagueño Parque Natural de los Alcornocales, fue controlado en la mañana de ayer. El incendio se declaró a primera hora de la tarde del sábado en una zona próxima a la estación de tren de Cortes de la Frontera.

Su origen pudo deberse a una chispa que saltó de una vía férrea, presumiblemente en mal estado, al paso de un tren de mercancías, según las hipótesis que barajan los expertos. Con todo, se mantiene abierta la investigación, ya que se detectaron varios frentes.

Las llamas, que afectaron zonas de las localidades de Cortes de Frontera, Benalauría, Benarrabá y Algatocín, eran controladas poco después de las diez de la mañana de ayer. Aunque inicialmente se aseguró que el siniestro afectó al Parque Natural del los Alcornocales, esta reserva de 168.000 hectáreas no se vio castigada por las llamas.

Según se precisó desde el Infoca, el incendio se inició en un paraje conocido como La Buitrera. Casi 80 de las hectáreas quemadas eran de arbolado -alcornoques y encinas- y 261 de matorral. Las llamas consumieron además otras 325 hectáreas de pastos y terrenos de cultivo, de las que 184 era zonas agrícolas y 141de pastizal.


El avance de las llamas había obligado a desalojar preventivamente el sábado a unas 170 personas -150 jóvenes y una veintena de monitores- que se encontraban en el albergue juvenil San Juan de la red Inturjoven, situado a tres kilómetros de Cortes de la Frontera. El grupo fue acogido en el polideportivo municipal de esta localidad.

A pesar de que las llamas se daban por controladas, a lo largo de toda la jornada de ayer se mantuvieron labores de refresco, dadas las altas temperaturas, para evitar que el fuego se reavivara.